Como bien dice el título del post, para llegar a buen término un tratamiento de ortodoncia con alineadores es imprescindible realizar refinamientos. Consiste en volver a escanear los dientes en la etapa del alineador y reestructurar la línea de tiempo.
A pesar de que el programa que usamos es preciso, hay muchos imponderables que confluyen para que exista cierto decalaje de los alineadores. Por ejemplo, los pacientes con mordidas muy fuertes pueden que deformen un poco el alineador y al cabo de unos días no sean tan precisos y no actúen como deberían
Algunos pacientes con mucha saliva o no llevarlo el tiempo suficiente pueden dar lugar a que ocurra ese decalaje, que aunque sea muy pequeño es suficiente para que el alineador no ajuste del todo en los días de activación.
En esos casos lo que se realiza es un nuevo escaneado de la boca y se continúa con la misma línea de tiempo sin aumentar el número de alineadores. El proceso se enlentece unos días pero se gana tiempo, ya que los alineadores se fabrican cuando se necesitan y no todos de golpe como en los casos de la competencia.
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